9.3.1.1.2 Concordancia del participio con un complemento directo antepuesto
Usted encuentra muy a menudo la afirmación completamente correcta que el participio perfecto tiene que concordar en género y número con el complemento directo si este se encuentra delante del verbo auxiliar.
ejemplos
L' ho visto. => Lo he visto. (a él)
L' ho vista. => Lo he vista. (a ella)
Li ho visti. => Los he visto. (a ellos)
Le ho viste. => Las he visto. (a ellas)
Del otro lado usted encuentra la afirmación que solo los pronombres personales lo, la, li, le tienen que concordar en género y número con el participio perfecto.
Tiene por lo tanto dos afirmaciones que a primera vista se contradicen. De una parte la afirmación que cualquier complemento directo que se encuentre delante del participio perfecto tiene que concordar en género y número con el participio perfecto. De otra parte que solo los pronombres personales lo, la, li, le tienen que concordar con el participio perfecto. Lo que parece ser una contradicción a primera vista no lo es si miramos las cosas más de cerca. Un complemento directo que se encuentra delante del predicado exige un pronombre redundante (lo, la, li, le). O sea si hay un complemento directo delante del predicado también hay un pronombre redundante y la primera y la segunda afirmación por lo tanto no se distinguen.
ejemplo
La casa, l' ho vista. <=> La casa la he visto.
Le case, le ho viste. <=> Las casas las he visto.
Sin embargo hay que ver, que solo en el caso que el complemento directo se encuentra delante del predicado debe ser recogido por los pronombre personales lo, la, li, le y solo con estos pronombres el participio perfecto tiene que concordar en género y número. Construcciones de este tipo son controvertidas en italiano.
A mí no me gusta.
A ti no te voy a dar nada.
Mi, ti, ci, vi no son pronombres redundantes en italiano (mejor dicho, su uso como pronombre redundante es controvertido). Pero incluso en el caso que se los utiliza como tales, no tienen que concordar en género y número con el participio perfecto.
Miramos a esta cita de un linguista italiano.
"Non basta dire che la concordanza del participio è obbligatoria solo nel caso di un pronome personale: occorre assolutamente precisare che tale obbligo sussiste solo quando il pronome è di terza persona ("lo", "la", "li", "le"). Negli altri casi ("mi", "ti", "ci", "vi", a cui si può aggiungere il "ne" partitivo) la concordanza è infatti facoltativa, e non rappresenta neppure la soluzione più comune: una ragazza, ad esempio, riferendosi a sé e alle compagne, otto volte su dieci dirà "spero che non ci abbia visto" anziché "spero che non ci abbia viste"."
"No basta decir que los pronombres personales tienen que concordar con el participio perfecto: Es absolutamente necesario precisar, que es obligatorio solo con los pronombre personales en tercera persona ("lo", "la", "li", "le"). En todos los otros caso ("mi", "ti", "ci", "vi", a los qualese se podría añadir "ne") es opcional y no representa nisiquiera la solución más comun. Una chica por ejemplo que habla de sí misma y de sus amigas diría en 8 de diez casos 'spero che non ci abbia visto / Espero que no nos haya visto' envez de 'spero che non ci abbia viste / Espero que no nos haya visto'."
Formulado de manera más general la pregunta es esta. ¿Porque se debe tratar los pronombres personales mi, ti, ci, vi de otra manera que lo, la, li, le? Hay en Italia personas que dicen que se debe hacerlo como en francés. En frances todos los pronombres personales tienen que concordar con el participio perfecto.
ejemplo
Ti ho vista. Je t' ai vue. Te he visto. (Si se habla de una mujer)
Algunos Italianos se preguntan por lo tanto porque hay concordancia después de lo, la, li, le,
ejemplo
Li ho visti
peron no obligatoriamente después de mi, vi, ci.
ejemplo
Vi ho visto / visti
A este argumento hay otros que responden que los franceses viven al norte de los alpes y los italianos al sur y por lo tanto no hay ninguna razón para hacerlo como los franceses. Este manual fue escrito en Berlín Alemania, o sea muy lejos de los Alpes y no tenemos ninguna intención de meternos en los conflictos internos de los pueblos románicos. La norma italiana es esta. Hay concordancia con los pronombres personales lo, la, li, le pero no después mi, ti, vi, ci. Después de estos úlitmos puede haber concordancia, pero no es obligatorio.